EL MUNDO ES LA ROSA DEL AZAR

I

Desde el hombro y la mirada, roto
Desde el vaso de resplandor
Mirado por el ímpetu curioso
Hasta el fuego de la noche ante el espejo
Dos milagros realizaron las amibas
Crecer multiplicándose en la sangre
Como el vuelo de una novia en el semblante
Dos milagros color ola
Uno por cada témpano de lira
Uno por cada beso de salida

Desde entonces miro el tiempo
Como quien lo va olvidando
Entre jaspes de prisión encantada
Y me escucho en la mirada de los otros

Desde entonces me persigo en cada ave
Cada arroyo me eterniza
Cada sílaba de amor me transparenta
Porque soy como el hastío de una época de guerras
Hecho de sol para sentir la noche
Hecho de luna para odiar el día

(Noches noches silenciosas como leones
Vosotras sois las jóvenes mías)

Desde el hombro hasta el tímido diamante
Que abre cursos de virtud en la ventana
Un solo sol de viento
Inflama la salud de mis pupilas

Fuegos de azar amor perdido
Yo soy quien te aventaja en cada muerte
Porque soy espejo
Porque soy rincón el mundo tiene esquinas
Porque abro en cada pétalo un perfume
Y tú no puedes ser sino la rosa.

II

Aquí está el témpano
Mecido en los impactos de las mieses
Témpano terrestre tu sonido
Varía en cada onda de hipnotismo
Como el flujo del olvido en un semblante

Témpano de amor tú solo eres
Tú solo ves el mar en las miradas
Tú solo por un pienso de igualdad te vas al cielo
Suspiras por el sol en el sonido
Imitas el valor sin sentir miedo

Aquí el diamante tan duro como un pecho
Dibuja el infinito sobre pieles luminosas
El busca tras el sol un pensamiento
El quiebra sus miradas en la roca
Guijarro que mece el témpano sonido
Que brota del contacto de la luz

Aquí los enemigos aquí sobre el espejo
Donde llueven con mi cuerpo los objetos
Hacía un lance luminal de espadas
Aquí en el mundo mío
De mi propia intimidad los enemigos
Escriben un tatuaje sobre un líquido de horas

Aquí metido en mí los gladiadores
Escriben un impar color de olas

Y el témpano terrestre pasea su pureza
Y tú no puedes ser sino la rosa.

III

Los labios se trizan los senos se adornan
El mundo se separa en un paisaje
De fluvial profundidad
Cada centro es un sistema planetario de la espuma
Un rigor del pasa-tiempo
El cuerpo de la ondulación que se distancia

Yo veo y me asemejo a este semblante
Emanado del aire
Que sigue el hipnotismo de las aguas
Un mago-precioso por ser de tantas muertes
El único sobreviviente que respira

Yo salgo del espejo
Yo soy un témpano de amor
En este mundo término del bosque
Y tú no puedes ser sino la rosa.

 

De 41 Poetas jovenes de chile, 1941