LA MEJOR PARTE

Cielo inútil batiendo por otras alas inocentes
En los follajes de agua pura levanta nidos de coral
Nubes inmóviles frente a muros que desaparecen
En la sombra inútil de calcular
El sol es defendido por un ciego
En los confines de las caricias de las cabelleras
Rostro desnudo manos sin ningún cómplice
Manos que yo balanceo en el tejido del sol admirable
Como un par de alas que se callan
Al primer contacto con el cielo.

Viajero miserable es preciso que tú vuelvas la cabeza
Y escuches una vez la última el batir de los párpados de mis miradas
La voz de los ignorantes en el fondo de las prisiones
Tú te marchas a los grandes desiertos
Y yo soy este muro que no acabo de comprender
Con grandes lágrimas yo te veo partir
Entre desconocidos que te sonríen en falso
Los cantos de los pájaros que se pierden de vista
Hombre fuerte tú no tendrás el valor de sonreír a esa mueca
Paisaje contrario árboles delicados
De los cuales penden mil garras incomprensibles
Y mil orejas de cristal de roca que trastornan los bosques
En los altos picos de mar en la cabellera de las nieves
Las estrellas migratorias hacen nidos de rocío
Otras escuchan las promesas de las estaciones boreales
Que les ofrecen deliciosas emboscadas de lavanda
Y delicados balcones de ceniza.

Paisaje pardo para los que ven y se callan
Sin hacer el mal sin hacer tampoco el bien
Hombre errante pero demasiado débil
Yo siento el peso de una piedra blanca sobre tu cabeza
Y veo como baten esas alas de granito
Suspendidas por las llamas de tus delirios aceptables
Sin jamás bajar a descansar ellas siguen
El sentido de la sed apasionada por el fuego.

 

De El AGC de la mandrágora,1957