III

¿Y qué ha sucedido con la paloma
Que dejó de sangrar
Y sus plumas enrojecidas de pronto perdieron el color?
¿Y qué ha sucedido con mi alma
Que se adelgazó
Y también de súbito
Se convirtió en un montón de cenizas?
Todo lo hemos ido perdiendo
Todo lo hemos lanzado furiosamente al mar
Para que sus olas lo hicieran trizas sobre las rocas
Y aún acallaran el grito
Con que yo pronuncio mi nombre
Suplicando clemencia.

Poco a poco hemos perdido la esperanza
De continuar el baile
Que danzábamos con tanta embriaguez
Como punto culminante
De nuestras más caras
Ilusiones.

 

De La mano enguantada, 1987