XXXII

Increíble
Pero es el caos que adopta la singular postura
De inclinarse ante toda sonrisa
Ante el pájaro que entristece a causa del frío
A tal punto
Que sus alas se tornan transparentes.

Lo hemos perdido todo todo en la ratonera del tiempo
La sal en la punta del labio
El aceite en las articulaciones
La angustia de pensar en la existencia de la muerte
Todo lo ha consumido el azul del cielo
Aún el beso que nos unía con el infinito.

Es el caos que gira sobre sí mismo
Para que el tú y el yo se preparen a la gran locura
Al silencio y su hermana la soledad
Los mismos que corroen las almas
Y saltan definitivamente
En el vértigo total.

Increíble
Todo está preparado para el gran silencio
Para el discurso maldito
El que cierra alternativamente el ojo izquierdo
Y el ojo derecho
El gran discurso de la nada.

 

De El calor animal, 1968 - 1969